INGREDIENTES
- 1 boniato rojo grande
- 3 cucharadas de cacao puro desgrasado
- 5 dátiles medjool o 7 dátiles secos corrientes (mira bien que no lleven glucosa ni aceite de algodón, tienen que ser 100% naturales. Lo sabrás porque son mate y no brilla su piel). Si quieres una opción para diabéticos puedes sustituir los dátiles por Xylitol.
- Ingrediente extra: 50 gramos de avellanas crudas o, en su defecto, aceite de pepita de uva o de oliva virgen extra de arbequila u otra variedad suave.
INSTRUCCIONES
1. Ponemos los dátiles a remojo. Si son Medjool no hace falta, ya que son carnosos, dulces y tiernos. Si has comprado los convencionales ponlos a remojo con agua templada un par de horas.
2. Mientras, asamos el boniato. Nosotras aprovechamos cuando encendemos el horno para hacer varias cosas, al estilo batch cooking. Ponemos el boniato entero sin pelar (solo lavado) y luego ponemos bastones de boniato a modo de patatas fritas, calabaza, cebolla… Así ahorramos energía y tenemos comida para más días.
3. Batimos. Una vez esté asado el boniato esperamos a que se atempere y lo vaciamos con ayuda de una cucharita. Lo ponemos en el vaso de la batidora (da igual si es tipo Thermomix o de mano).
4. Añadimos el cacao y probamos. Conforme veamos que está de dulce, añadimos los dátiles hasta que tenga el punto de dulzor deseado. Al estar enteros los dátiles la fibra de éstos recubre nuestras vellosidades intestinales y evita que nuestro organismo absorba gran parte de la cantidad de azúcar que contiene, evitando picos de insulina. Por eso es tan importante tomar las frutas siempre enteras y no en zumo.
Como verás la textura no tiene la palatabilidad de la nutella porque carece de grasas. La parte buena es que te la puedes tomar como un postre a cucharada limpia (y si le pones nata montada de coco lo flipas, para ello solo tienes que ‘montar’ la parte dura de una lata de leche de coco).
Si lo que quieres es añadirle esa untuosidad hemos de agregar una grasa, como un aceite suave o una crema de avellanas.
5. Para hacer la crema de avellanas solo tienes que poner las avellanas crudas en el procesador de alimentos. A nosotras nos gusta más hacerlo con una batidora de mano potente, porque en la thermomix al ser tan grande es más complicado trabajar pequeñas cantidades.
El proceso es laborioso, pero muy sencillo. Verter las avellanas y moler. Moler una y otra vez hasta que las avellanas desprendan el aceite y se transformen en una crema fina. Podéis hacer una crema con 250 gramos de avellanas (es más fácil trabajar con cantidades más grandes) y guardar el resto en un bote en la nevera. Se mantendrá perfectamente varios meses.
6. Finalizar. Ahora solo tienes que añadir la cantidad de crema de avellanas que necesite tu nutella. A nosotras nos gusta que se note la avellana, y eso le da ese punto graso a nuestra crema de cacao perfecto. Ahora puedes comerlo a cucharadas, en tostadas…
¡Contadnos qué os parece!