INGREDIENTES
- 100 gr de mezcla de lechugas: batabia verde, batabia roja, lollo rojo, espinacas baby
- 40 gr pasas y frutas secas
- 40 gr nueces a trocitos
- 10 gr (2 cucharadas) pipas calabaza naturales (sin tostar y sin sal)
- 20 gr (2 cucharadas) pipas girasol naturales (sin tostar y sin sal)
- 1 tomate de ensalada mediano (160-180 gr)
- 100 gr de plátano
- 20 gr de picatostes de garbanzo (sin gluten)
- 40 ml de vinagre tipo módena
- 30 ml AOVE
- Sal
INSTRUCCIONES
1. En una sartén pequeña echamos un poco de sal y añadimos las pipas de calabaza y las de girasol y las tostamos removiendo para que no se quemen
2. Una vez tostadas con ayuda de un colador les quitamos la sal sobrante y las esparcimos en un plato para que se enfríen
3. Lavamos las lechugas y las dejamos a remojo en agua fría
4. Troceamos el plátano y le damos un toque en la sartén para entibiarlo y hacerlo más blandito.
5 Troceamos el tomate también a daditos y le añadimos sal
6. En un bote pequeño que se pueda cerrar ponemos un poco de sal, el vinagre y el aceite, cerramos y agitamos
7. Escurrimos bien las lechugas y las dividimos en dos platos
8. Vertemos la mitad del contenido del bote esparciéndolo en cada plato de lechuga
9. Añadimos la mitad de cada ingrediente en cada plato sobre las lechugas: nueces, pasas, pipas, queso, tomate y por último los picatostes
NOTAS:
Claro está, la mezcla de lechugas es a gusto, pero para esta ensalada deben ser lechugas y brotes tiernos pero no crujientes ya que añadimos frutos secos y picatostes que ya le dan este toque crujiente.
Lo más importante de una ensalada, además de que el producto sea fresco, es el aliño por eso no importa si hacéis un poco de más, en el bote cerrado con tapa se puede conservar varios días.